Como casi todos los años, nos reunimos en familia para disfrutar de las festividades.
No obstante, mi hermana y yo, por una parte estamos siempre juntos y por la otra parte Paula tiene a la familia muy lejos, y es por esa razón que hacemos una gran reunión y celebración en la sede habitual: La Hacienda Hostal Rancho La Quinta en San Joaquín, Estado Carabobo.
De igual manera la pasamos divinamente en compañía de los siete hermanos de mi cuñado y sus respectivas familias, lo que contabiliza un total de casi 40 personas ese fin de semana.
Esta hacienda queda a dos horas aproximadamente de Caracas y sirve de punto medio de encuentro para todos, ya que la familia de mi cuñado vive en diferentes partes de Venezuela.
Como es habitual, nos dividimos las responsabilidades a la hora de traer ciertas comidas: tradicionalmente mi mamá trae las 80 0 90 arepas para los desayunos, José Antonio y Liz traen el pernil - siempre espectacular, la mamá de Michelle trae las "bolitas de chocolate" que son una delicia, Rosa trae las tortas y las hallacas, Paula y yo traemos la tortilla española y la empanada gallega.
Al momento de entregar los regalitos a todos, la ley siempre la dicta el Abuelo Juan, por lo que el dá inicio oficialmente a la entrega de los regalos a todos los nietos e hijos, nueras y yernos, por lo que es un espectáculo cada año.
Al final, terminamos con la sabrosa cena navideña.
Los días transcurren entre las cabalgatas a caballo, las piscinas, la parrilla, el fútbol, etc.
Na guará....
